A inicios de este año la Organización Internacional de Normalización (ISO) ha lanzado la nueva ISO 14068-1. Esta nueva norma obliga a las organizaciones a establecer un plan de carbono a corto y a largo plazo y, además, a abordar las emisiones residuales hasta 2050.
¿Qué implica esta norma?
Límite del sistema: Este concepto define las fronteras de los procesos unitarios en la producción de un producto o servicio. Al delimitar estos procesos, las empresas pueden identificar las fuentes de emisiones de GEI y, por tanto, enfocar mejor sus estrategias de mitigación y compensación.
Compensación de carbono: Es una herramienta esencial para las organizaciones que buscan neutralizar su huella de carbono. La norma refuerza la importancia de la adquisición de créditos de carbono auténticos, garantizando que se retiren del mercado para evitar su doble uso. Esta medida asegura la credibilidad y el impacto real de la compensación.
Créditos de carbono: Los créditos de carbono son fundamentales en la estrategia de compensación. La ISO 14068-1 distingue entre créditos que evitan, reducen o remueven emisiones. Cada tipo de crédito debe alinearse con los objetivos de sostenibilidad de la empresa.
Programas de GEI: La norma reconoce la relevancia de los programas de GEI, tanto voluntarios como obligatorios, en la gestión de emisiones. Estos programas ayudan a las organizaciones a registrar, contabilizar y gestionar sus emisiones de forma efectiva y transparente.
Entidades en busca de carbono neutralidad: La ISO 14068-1 establece directrices para aquellas organizaciones que buscan demostrar su neutralidad en carbono, ya sea a nivel global o para productos específicos. Para lograr este estatus, es indispensable que la empresa tenga un plan integral de reducción de huella de carbono.
Cadena de valor: La norma subraya la importancia de considerar toda la cadena de valor, desde la obtención de materias primas hasta la entrega del producto final. Para las empresas, esto significa adoptar una visión de ciclo de vida completo que permita reducir el impacto ambiental en cada etapa.
Documentación y transparencia: La transparencia en la gestión del carbono es un requisito clave. La norma resalta la necesidad de documentar y mantener registros detallados sobre las emisiones, reducciones y compensaciones. Esta información no solo refuerza la credibilidad, sino que también es esencial para la mejora continua de las prácticas de sostenibilidad.
Conclusiones
La norma ISO 14068 proporciona un marco para que las empresas aborden la neutralidad en carbono de manera efectiva y con sentido. Comprender y aplicar estos puntos es esencial para las empresas u organizaciones que se comprometan con la sostenibilidad.
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