Bruselas, 26 de febrero de 2025 – La Comisión Europea ha presentado su propuesta de Paquete Ómnibus I, una reforma que busca reducir la carga administrativa en un 25% para aliviar a las empresas y mejorar la competitividad en la Unión Europea.
Si bien este paquete responde a las quejas sobre el exceso de regulación, también ha generado preocupación entre actores clave del sector ambiental y empresarial. ¿Es una simplificación necesaria o un retroceso en las políticas climáticas de la UE?
¿Qué es el Paquete Ómnibus I y qué cambios propone?
La Comisión Europea ha incluido en el Paquete Ómnibus I una serie de modificaciones que afectan regulaciones clave en informes de sostenibilidad (CSRD), diligencia debida en sostenibilidad (CSDDD), ajuste en frontera de carbono (CBAM) y la taxonomía verde.
Los cambios más relevantes para las empresas incluyen:
CSRD (Directiva de Informes de Sostenibilidad Corporativa):
- Solo se aplicará a empresas con más de 1.000 empleados y 450M€ de facturación (antes 250 empleados y 40M€).
- Se reduce la cantidad de información que las empresas deben reportar sobre sus impactos ambientales y sociales.
- Se introducirá un estándar voluntario de informes para empresas fuera del alcance obligatorio.
- Se retrasa su aplicación 2 años, lo que da más tiempo a las empresas para adaptarse.
CSDDD (Directiva de Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa):
- Se suavizan los requisitos de control sobre la cadena de suministro, eliminando algunas obligaciones para empresas más pequeñas.
- Se reduce el alcance del deber de diligencia en materia de derechos humanos y medio ambiente.
- Se retrasa su aplicación 3 años, dando más margen para su implementación.
CBAM (Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono):
- Se introducen cambios para simplificar el reporte de emisiones importadas en sectores como el acero, cemento y fertilizantes.
- Se busca reducir la carga administrativa para importadores sin debilitar el objetivo de evitar fugas de carbono.
Taxonomía Verde:
- No se elimina, pero se revisarán algunos criterios para hacerla «más accesible» y menos restrictiva para las empresas.
Resultado: Se estima que 85% de las empresas que antes debían reportar su impacto ambiental y social quedarán fuera de la CSR y muchas tendrán más tiempo para adaptarse.
El debate: ¿alivio para las empresas o riesgo para la sostenibilidad?
Esta propuesta ha generado posturas encontradas dentro de la UE.
- A favor de la propuesta:
✔ Alivio regulatorio para empresas que enfrentaban costos administrativos elevados.
✔ Mayor flexibilidad en el cumplimiento de normativas de sostenibilidad.
✔ Facilita la competitividad europea en un contexto de desventaja frente a EE.UU. y China. - En contra de la propuesta:
– Menos transparencia sobre huella de carbono y sostenibilidad en la cadena de valor.
– Menor presión para la descarbonización, afectando los objetivos climáticos de la UE.
– Incertidumbre para inversores sostenibles, dificultando el acceso a información fiable.
España se opone: no a la relajación de normas ambientales
España ha mostrado firme oposición a esta reforma, argumentando que:
- Reducir la burocracia no debe significar reducir la ambición climática.
- Las normas como la CSRD y CSDDD son fundamentales para garantizar la transparencia empresarial en materia ambiental.
- Las empresas que apuestan por la sostenibilidad deben seguir teniendo incentivos y no verse en desventaja frente a aquellas que optan por el mínimo cumplimiento.
El gobierno español y otros países han pedido mantener la esencia de las regulaciones, pero flexibilizar la implementación para las pymes en lugar de eliminarlas.
¿Qué pueden hacer las empresas?
Aún queda camino por recorrer. La propuesta debe ser debatida y aprobada por los Estados miembros y el Parlamento Europeo, lo que significa que podría haber modificaciones antes de su adopción final.
Sin embargo, más allá de la regulación, las empresas deben preguntarse:
¿Tiene sentido esperar a que la sostenibilidad sea una obligación legal, o es mejor adelantarse y convertirla en una ventaja competitiva?
La realidad es que las normativas pueden cambiar, pero la presión del mercado, inversores y consumidores hacia la sostenibilidad no desaparecerá.
En airCO2 ayudamos a las empresas a medir y gestionar su huella de carbono de manera sencilla y efectiva. Con normativa o sin ella, las empresas que lideran en sostenibilidad serán las que triunfen en el futuro.
- ¿Tu empresa necesita claridad en su impacto ambiental?
- ¿Quieres adelantarte a los cambios normativos y convertir la sostenibilidad en una ventaja competitiva?
Hablemos. Reserva una conversación con nosotros y descubre cómo airCO2 puede ayudarte a cumplir tus objetivos climáticos de forma sencilla y efectiva.
Deja una respuesta